Después de muchos meses de frio y cautiverio, por fin llegó la ansiada primavera (aunque no sabemos bien donde). Estábamos deseando empezar la temporada de picnics, salidas al campo y disfrutar del buen tiempo, del aire libre... pero el tiempo es dichoso y nos está haciendo esperar un poco más de lo planeado.
Así que, como yo misma me digo: "A días grises, sonrisas de colores" y el lunes pasado decidimos ir a pasar la mañana con la abuela al campito.
A Noa le encanta estar en contacto con la naturaleza, ya sea cuando vamos a la montaña, a casa de los abuelos o bien cuando nos escapamos al apartamento que tenemos en la costa. Y no lo digo por decir, sino que se lo noto en el estado de ánimo, en como hace las cosas y su manera de actuar.
Así que pasar la mañana en casa de los abuelos y verla feliz pasó por alto que el día fuera gris, porque su sonrisa lo llena todo de color.
Y como no ¡cuanto más nos ensuciemos, mejor nos lo habremos pasado!
Espero que os haya gustado el post y como nosotras no os dejéis apabullar por estos días grises, porque son igual de bonitos que el resto. Solo hay que mirarlos con otros ojos y !sonreír!
¡Besos y feliz día!
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