Así que como la otra tarde hacía muchísima calor para ir al parque pero no nos gusta estar quietas, decidí probar la pintura de dedos que compramos hacía unos días en Baby Deli de Barcelona.
A Noa le encanta pintar, pero nunca lo había hecho con las manos y creo que fue una experiencia muy enriquecedora. Ella pinta con acrílicos o acuarelas pero siempre con brochas y pintar con las manos es totalmente diferente. Con esta actividad vi como la peque disfrutaba tocando la pintura, mirándose y tocándose las manos...
No lo había probado hasta ahora pero no va a ser la última vez que lo hagamos porque creo que es una manera muy divertida de desarrollar la creatividad a la vez que se divierte. Con la pintura vi cómo se expresaba de una manera mucho más personal, mucho más ella.
Tengo el privilegio de poder disfrutar de ella todo el tiempo y a veces creo que no soy totalmente consciente de la gran suerte que tengo. A veces me enfado porque no tengo tiempo para mí, porque me giro un momento y está todo del revés. Pero luego me siento, respiro y me doy cuenta que poder disfrutar de ella es lo mejor que tengo.
Luego te sientas otra vez, respiras, te relajas y la bañas tranquilamente y con esmero para que no quede ni rastro de la explosión de color que hemos vivido ;)
P.D: Si lo probáis ya me contaréis que tal vuestra experiencia y si os ha gustado tanto cómo a nosotras.
¡Besos y Feliz día!
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